martes, octubre 19, 2004

Losing my religion

Hay una tipita en la oficina que es judía de qué sé yo qué retorcido clan [¿quizás los famosos judíos antisemitas? who knows...] y su religión le prohíbe saludar con un beso a otro ser humano.
La alta dirigencia católica trata con toda de convencer a sus fieles de que lo correcto es no tener sexo extramatrimonial y que los métodos anticonceptivos son malos y antinaturales.
Y los musulmanes tengo entendido que explotan contra edificios enemigos en nombre de Alá, pero claro que de ésos no conozco ninguno, así que mejor no hablar sin saber...

¿Cuándo fue que convirtieron algo que debía ser una actividad recreativa e inspiradora de esperanza en semejante mierda?